Irlanda: la tierra del Chorizo Angus Meal - DÍA 3

LUNES, 25 DE FEBRERO DE 2008 - DÍA 3: GALWAY - ISLAS ARÁN - SIXMILEBRIDGE (206 KM)



Nos levantamos prontito, que había que estar a las 10:30 en el ferry que nos llevaría a las Islas Arán. Desayunamos como podemos y vamos a buscar el coche, antes de montarnos en él decido que hoy conduzco yo, que ya llevamos dos días con el coche y todavía no he pisado el acelerador del carraco :D Así que nada, me monto en el asiento de la derecha y ajusto todo lo ajustable. La sensación de ir por la izquierda es COJONUDA jajajaja! Vas pendiente de todo y parece que te la vas a pegar de un momento a otro xD

Nos cuesta más de lo previsto salir de Galway, no por dificultad sino por tráfico, y es que es lunes mañanero y eso se nota. Más tarde que pronto dejamos Galway atrás, con más pena que gloria. Nos ha parecido una ciudad fea de cojones, aunque es justo decir que no le hemos dado mucha oportunidad, no era nuestro objetivo en el viaje, así que no hay siquiera decepción.

Vamos recorriendo toda la costa en busca del puerto, pero un poco acojonados porque no aparece en el mapa la población desde la que se supone que sale el ferry: Rossaveel, así que intentamos orientarnos con los pueblos que sí aparecen, todo esto con la hora pegada al culo. Después de 45 minutos conduciendo sin ver una puta señalización que indicase que por allí cerca andaba aquello, recorriendo carreteras costeras de mala muerte, llegamos a un cruce de vías donde vemos que hay una señalización que indica que el puerto se encuentra a 15 kilómetros en la dirección por donde veníamos XD

Es el momento en que decidimos que yo soy mejor que mi amigo con el mapa y que él le tiene cogido mejor el truco a eso de conducir por carreteras de metro y medio de ancho xD Volvemos a toda ostia sobre nuestros pasos, y cuando llevábamos nada y menos conduciendo veo una salida a la derecha con una señalización de un barco, de la cual mi amigo decide pasar de largo xD Normal, porque todas las señalizaciones vienen en gaélico, y ya si les sobra pintura, pues las ponen en inglés, pero vamos, que no es prioritario :@ Volvemos otra vez sobre nuestros pasos jaja y en 5 minutos nos plantamos en el puerto. Faltaban segundos para que el ferry partiese, así que tras comprar los tickets el colega que los vendía avisa al capitán para decirle que nos espere.

Está cayendo la del pulpo, por lo que antes de llegar teníamos serias dudas de si siquiera el ferry saldría, pero pensamos que no pueden dejar incomunicada a la gente de las islas, así que no tiene más cojones que salir, además de que diluviar es lo más normal en el país "Four Seasons in one" xD Nada más montarnos en el ferry éste echa a andar, así que suponemos que nos estaban esperando para partir... ainsss los españoles siempre dando la nota :D

Lo que no sabíamos era lo que nos esperaba en el trayecto a las islas, sin duda, el momentazo del viaje! El día era chungo de cojones, diluviaba y decir que la mar estaba picada es quedarse corto xD Conforme vamos metiéndonos mar adentro el ferry empieza a moverse más y más, yo no había montado en barco nunca así que me acojono un poco, a ver si la vamos a liar. Llega un momento en el que el barco no se mueve, directamente vuela, planea sobre las olas, pegando unos panzazos como no los da ni un chiquillo aprendiendo a tirarse de cabeza. Con cada panzazo nos da un vuelco el corazón, pero nos lo estamos pasando como los indios, cada panzazo es una fiesta en el ferry, lleno de guiris como nosotros xD Hay un momento en el que el ferry en el aire se mueve de izquierda a derecha, dando un panzazo lateral, y eso ya es el acabose. Grabamos unos cuántos videos para demostrar las ostias que está pegando el barco sobre el mar, y ya de paso para despedirnos de nuestros amigos y familiares :D Todo el barco se lo pasa en grande salvo el colega de nuestra derecha, que se pasa el trayecto agarrado al reposabrazos como si le fuese la vida en ello (bueno, realmente le iba la vida en ello xD). En esto que a mi amigo le empieza a entrar calor, se levanta a quitarse la chaqueta durante uno de los panzazos y literalmente VUELA, él puede dar fé :P Pasa de las risas al calor, del calor al agobio, del agobio al mareo, del mareo a la blancura, y ahí se quedó, blanco como la nieve xD Afortunadamente estamos casi llegando, así que el mal rato dura poco. Eso sí, nada más bajarnos, y a pesar del mareo, coincidimos en que han sido los 25 euros mejor invertidos de nuestra vida :D

Afuera diluvia. No habíamos decidido si recorrer la isla a pie o hacerlo en bici, pero con la que cae parece lógico hacerlo en bici, o no... xD Hace un viento del copón, pero no nos importa, confiamos en nuestras piernas jaja! Varias furgonetas de tours por la isla nos invitan a montarnos, pero les decimos que no, que a nosotros lo que nos excita es subir cuestas pedaleando, con viento huracanado y diluviando. Todos nos dicen que estamos como una puta cabra, se imaginarán que vamos de Guinness hasta las cejas, pero no! xD Total, que alquilamos un par de bicis. De momento, la primera en la frente, estos irlandeses son gilipollas, no sólo conducen por la izquierda, sino que utilizan el freno derecho para la rueda de alante, por lo que como frenes en modo automático por esas carreteras "asfaltadas" la ostia es de las que hacen historia... pero eso no nos detiene, por supuesto.

El objetivo es Dun Aonghasa, un fuerte de hace 4.000 años que está en la otra punta de la isla. El que nos alquiló la bici nos dice que tenemos dos posibles rutas: la costera, más larga y llana, o la montañosa, más corta pero más rompepiernas. Somos cautos y cogemos la costera. Es una pena no tener fotos del trayecto hacia el fuerte, no sólo por el maravilloso paisaje, sino por el espectaculo de vernos en las bicis con la que está cayendo, sin duda toda una experiencia. Por el camino vamos disfrutando de las vistas, todo lleno de casitas, con sus animales pastando en terrenos separados por muros de piedra hechos literalmente con una piedra encima de otra, sin más complicación. Poco antes de llegar pasamos por una playa donde paramos a descansar, y donde parece que a lo lejos distinguimos focas, por desgracia muy escurridizas, por lo que no nos da tiempo a pillarlas desprevenidas xD

Tras una hora de camino llegamos al fuerte. Para llegar a él hay que dejar las bicis antes y recorrer el resto del camino a pie. El camino en bici es duro, pero luego echar a andar no es más fácil, porque hace un viento del copón!

Luchando contra el viento xD

De Irlanda (Febrero 2008)

Por fin llegamos al fuerte.

El fuerte desde el exterior

De Irlanda (Febrero 2008)

Copypasteo literalmente lo que mi compi ha escrito de él en su diario del viaje:

Es un fuerte de la Edad de Hierro, el mejor conservado de toda Europa.
El fuerte tiene una muralla de varios anillos que protegen el recinto central. En la parte oeste está protegido por un imponente acantilado, que lo hace totalmente inexpugnable. También tiene un amplio campo de piedras hincadas, que estarían destinadas a dificultar el acceso al fuerte por la zona menos segura.

Muros y piedras hincadas defendiendo el fuerte

De Irlanda (Febrero 2008)

De Irlanda (Febrero 2008)

La sensación de estar allí, en un lugar tan mágico, es indescriptible. Las vistas son maravillosas, y el entorno y el tiempo lo hacen más mágico todavía.

Vistas de la isla desde el fuerte

De Irlanda (Febrero 2008)

De Irlanda (Febrero 2008)

El mar está picadísimo y choca en la base de los acantilados con una fuerza impresionante, levantando olas enormes.

De Irlanda (Febrero 2008)

Además, la sensación de desprotección es absoluta. El acantilado es recto y no hay ningún tipo de valla, ya que el fuerte se conserva tal y como es, sin carteles ni vallas ni nada. De nuevo, como en los acantilados de Moher, soy incapaz de acercarme al borde de pie, con la diferencia de que aquí hacía tanto viento que en un golpe de éste acabas en las rocas de abajo más pronto que tarde, y después de haber sobrevivido al viaje en ferry sería una pena morir allí xD

El mar embravecido desde el borde del acantilado

De Irlanda (Febrero 2008)

Haciendo el capullo xD

De Irlanda (Febrero 2008)

A mi me flipa todo lo que veo, y entre los 2 comentamos que es una pena que haya cosas tan horribles y tan famosas, y haya cosas tan maravillosas como ésta que apenas tengan publicidad, pero en cierto modo nos alegramos, pues estábamos los dos allí sólo, disfrutando de un fuerte de 4.000 años de antigüedad, y disfrutando del momento sin nadie que nos molestara ni nos estropeara las fotos, pero no sabíamos que recibiríamos una visita xDDDDD

El interior del fuerte

De Irlanda (Febrero 2008)

En una de las millones de veces que nos acercamos al lateral de los acantilados, desde donde se ven toda la hilera de éstos dominando la isla, vemos a los lejos dos figuritas recorriendo el puto borde de los acantilados. Una zona totalmente escarpada y fuera de los caminos "oficiales".

Los acantilados desde el fuerte

De Irlanda (Febrero 2008)

Nos preguntamos quienes son esos dos tarados, mientras vemos como se acercan pelogrosamente al borde, y con viento que hacía estaba la cosa como para gilipollear... xD

Los dos taraos xD

De Irlanda (Febrero 2008)

Nos partimos la caja cuando descubrimos que uno de ellos era el que había estado a punto de arrancar el reposabrazos del ferry. Intentamos defender el fuerte de la invasión enemiga, pero desistimos cuando nos damos cuenta de que no podemos luchar contra semejantes tarados, pues si son capaces de eso a saber de qué más serán capaces xD Cuando llegan a nosotros nos presentamos, nos dicen que son franceses y les preguntamos que qué pollas hacen y nos dicen que han cogido esa ruta para no pagar el mísero euro que cuesta entrar al fuerte... como diría Obelix, estos franceses están locos...

Por desgracia hay que ir pensando en volver, porque todavía no hemos comido y hay que desandar todo lo andado. Nos vamos superfelices del espectaculo vivido y volvemos a coger las bicis. Hacemos un intercambio de mochilas y decidimos volver al pueblecito por la ruta escarpada, por acaparar más. Cuando llevábamos un par de kilómetros recorridos nos encontramos de nuevo con los franceses, que se habían parado a hacerle una foto al paisaje, en esto que mi amigo me grita algo que no entiendo, me giro, y me hace un gesto de hacer una foto, no le entiendo una mierda así que me acerco, y es cuando me dice que se ha dejado la cámara de fotos apoyada en un muro en el parking de bicicletas, justo cuando estábamos haciendo el cambio de mochilas xDD

En situaciones así se demuestra la resistencia humana :D Durante el camino de ida mi amigo iba flojeando, a veces lo tenía que esperar y se le notaba menos fuerte con las piernas, pero cuando supo que su cámara estaba en peligro... vamos, si no recorrió 2 kilómetros en decimas de segundo que me ahorquen, parecía que le perseguían una panda de leones xDD

Afortunadamente la cámara estaba a salvo, así que hicimos el camino de vuelta sin más contratiempos, disfrutando del paisaje. Por desgracia no quedaba mucho tiempo para ver el otro fuerte de la isla, así que volvimos directamente al pueblo, donde paramos en un supermercado a comprar pan de molde y fiembre. Buscamos un sitio donde resguardarnos del frío, del viento y del agua, pero no lo encontramos, así que comimos a la intemperio al borde del mar, como dos buenos aventureros, comiendo así que se quiten los restaurantes de 7 tenedores hombre!! Hicimos un poco de hora mientras nos resguardabamos en la oficina de turismo, y al rato cogimos el ferry de vuelta.

El viaje de vuelta fue mucho más tranquilo que el de ida, de hecho me lo pasé durmiendo. Eso sí, me quedé frito pensando en que el día de hoy lo recordaría siempre. Me acordé de un post que hay en el foro que recoge los momentos mágicos que todo viajero ha vivido en cada una de sus experiencias, y en que estar en el fuerte había sido una que jamás olvidaría.

Cuando desembarcamos volvimos al coche, nos pusimos ropa seca y nos encaminamos a Sixmilebridge, donde pasaríamos la noche, o al menos eso esperábamos, ya que la primera noche no lo habíamos conseguido. Esta vez esperábamos llegar con tiempo xD Yo me había empeñado en ir a los acantilados de Moher para verlos de noche, pero el tiempo se nos echaba encima y para ir hasta ellos había que recorrer las carreteras de mala muerte de la costa, mientras que podíamos ir a Sixmilebridge por una carretera humana sin pasar por ellos, de modo que decidimos que no. Una pena, pero todavía nos quedaba algo de sensatez, aunque no habíamos demotrado eso alquilando bicis horas antes xD

Llegamos con hora al albergue, esta vez sí xD El dueño del albergue nos explicó que me había mandado un correo diciéndome que llegábamos muy tarde la primera noche, y que por ello no habría nadie para recibirnos, pero que nos había dejado la llave en la ventana. Un detallazo, lástima que mi padre borrase ese email antes de que yo pudiera echarle el guante xDD

En fins, nos duchamos, que falta nos hacía y no encaminamos a la cocina para hacernos los espaguetis que nos sobraron la noche anterior, pero el dueño nos dijo que la cocina a esas horas ya estaba cerrada... cojones, definitivamente Sixmilebridge la había tomado con nosotros! :O

Así que no nos quedó más remedio que darnos un garbeo por el pueblo para ver si comíamos algo. Lo que no sabíamos es que nos faltó el chomino de una mosca para salir a ostias xD Copypasteo de nuevo, porque cada vez que me acuerdo me pongo de mala ostia:

Esta noche comimos en la que debía ser la única pizzería de la localidad, regentada por un par de imbéciles que decidieron cachondearse del poco turismo que tiene el pueblo (nosotros). La historia fue que como no había servilletas a la vista y no recordaba como se decía servilleta en inglés… me acerqué a la barra y dije con mi mala pronunciación: “Do you have anything to clean my hands?” Que por lo visto en Irlanda debe significar algo así como “Cachondeate de mí, que es gratis” Así que me ofrecieron un cartel de rugby para que me limpiase mientras se descojonaban de la risa. Les puse cara de “Vosotros es que sois tontos, ¿no?” y se partían la polla a pesar de que estoy seguro de que “esa cara” es universal. En fin, se puede pasar uno todo el día matando gilipollas y no acaba.

En fin, tras comprobar que a los irlandeses no les hace falta beber cerveza para ser unos capullos impresentables nos volvimos al albergue, donde pillamos cama tras un día agotador.

El día 3 se acababa...